
-“Padrino, han cambiado la máquina de “Dani”
-Cual han puesto Consigliere mío…
-Una que manejas a Michael Jackson
-Vamos para allá…
Nos estamos refiriendo naturalmente a MoonWalker, versión electrónica de la película de mismo nombre que Michael estrenó en 1988 y que Sega se encargó de trasladar a sus recreativas en el año 1990 para su flamante placa System 18.
En aquella época y antes que el cantante entrara en declive, para más tarde volver a resurgir de sus cenizas tras su muerte, Michael Jackson era para la chavalada una especie de Semi Dios de ébano para más tarde convertirse ya en un Dios "Gris perla", tras la publicación de “Bad” con su regreso de los quirófanos, que nos lo devolvió ya transformado en Blancanieves.
Si citamos “Bad” es por la sencilla razón que dentro de la configuración de temas que componían el álbum, encontramos “Smooth Criminal” piedra angular de la película que posteriormente estrenaría, y mecha de inicio con el que hilvanar el imposible argumento de la película de MoonWalker en la que la única lógica a su argumento, la encontramos en lo ilógico de verla de una tacada.
La película es una sucesión de videos musicales del artista y así es como hay que tratarla, ni más ni menos, el que no lo haga de esa manera e intente hacerse con su hilo argumental, pobre de él, encontrará más problemas y sinrazones, que en cualquiera de las obras de David Lynch, además como esto no es una entrada del artista ni de su película, mucho más no vamos a ahondar en el tema.
Aun así, argumento según wiki:
“La película se compone de un collage de historias cortas, en lugar de ser una historia continua. Cada uno de los segmentos se describe en las subsecciones a continuación”.
Lo que habíamos dicho…
Argumento según Orgullogamer:
Michael Jackson escapa de los estudios de rodaje agobiado por su “fama” de Dios "perla". Para ello coge una máscara de conejo, una chupa de cuero y una moto “Choper” y se lanza a la carretera. Por el Camino, un conejo "autentico" motero se pica con él. Se paran junto al Cañon del colorado, y comienzan un duelo de bailes. A continuación, y como buen salvador de los niños, se entera que un tal Mr Big va detrás de él, a la par que va secuestrando niños como un descosido.
Nuestro Dios viaja a los años treinta y comienza la búsqueda y rescate de los chavales…sigue la cosa pero no recuerdo muy bien como…sólo sé que al final consigue sus objetivos, como los comerciales de teléfonos móviles, se transforma en Mazinger Z, reparte estopa a los malos, para finalmente volverse a transformar en nave que lo lleva a las estrellas, supongo que su hogar…Como veis, esto no tiene sentido a menos que vayáis hasta las cejas de Crack.
Bien, cuando a los programadores de Sega les dijeron que tenían que adaptar la película a videojuego, un tercio de ellos se hizo el harakiri, el otro se cortó el dedo meñique de la mano dándolo como ofrenda a su jefe, y el tercio restante, accedió a la petición de sus superiores, eso si, dándose de buen gusto a la marihuana para que las paranoias del videojuego estuvieran en concordancia con las de las película.
Por ejemplo, para que vamos a poner a un Michael, pudiendo poner Tres!.

El argumento del juego toma como referencia el video musical de Smooth Criminal, en una sucesión de pantallas que nos recordaran a sus videos musicales en su ambientación, acompañados por su correspondiente y excelente banda sonora, deberemos recorrer las estancias en busca de los niños perdidos, acabando con los esbirros hasta el enfrentamiento final con Mr Big. El clásico avanza y destroza la cara de todo lo que no seas tú. Sin complicaciones, una vez más, claro, directo y divertido.
Hemos comentado que para pulverizar a los malos, los “Michaeles” tienen en su haber, la auténtica mano de Dios, (no como Maradona), que verá potenciado su poder, manteniendo el botón de turno pulsado, que hará cargar de energía el poder de nuestro rayo, un “mini tornado” aparecerá en nuestra mano alzada, indicando que la carga está lista, al tiempo que se va marcando un “MoonWalk”…eso es chulería sí señor, solo nos queda dirigir el devastador rayo cargado, contra algún fulano desalmado para carbonizarlo…
Pero no acaba aquí la chulería, en todo “Yo contra el barrio” existe un movimiento que nos limpia la pantalla de enemigos, bien con un ataque mágico, como por ejemplo en los Golden Axe y sus pócimas azules o físico, como en el Final Fight y el ataque tornado de Hagar, ambos nos limpian la pantalla, como decíamos, a costa de perder o bien nuestra colección de pócimas o un poquito de vida de nuestro personaje en los ataques físicos.
Pero aquí somos Michaeles, y antes de barrer a los enemigos, echamos un "bailecito" coreografiado, que quita el hipo y el sentido de los incautos malvados.
Pero no acaba aquí la fiesta, ya que de vez en cuando, en marcadas ocasiones, aparecerá el mono de Michael, y no nos referimos al que dá con el tabaco, drogas o alcohol, nos referimos a su jodido mono “Bubbles”. Cuando aparece el mono empieza el espectáculo, si todavía cabe aún más, ya que cuando cogemos al chimpancé, Michael, se transformará en “Mazinger Z plateado” y comenzará a soltar Rayos laser y misilazos por todo el escenario como un auténtico poseso, a diestro y siniestro.
"Mazinger Jackson"
Si pensáis que con todas estas ayudas divinas, el juego es un paseo, echar una partida e intentar pasároslo con un solo crédito, como los buenos, para que comprobéis por vosotros mismos que no.
En fin, buen juego que no llega al notable, pero que cumple perfectamente su función, echar un buen rato y sentirse por unos segundos como el magnífico Michael, claro que eso en los 90, porque ahora va a ser que no! Lo de sentirse como él digo.
Os dejo con un video del juego completo a dobles, para el que lo quiera disfrutar o no le apetezca jugarlo pero si verlo completo!
Versiones a compatibles de la recreativa como tal no hubo, ya que Sega se aseguró la licencia y tan sólo nos “obsequió” con la versión en Megadrive y alguna que otra cosa rara, pero de eso; ya habrá ocasión de hablar…
By Baito -Orgullogamer
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