CRYLO, el Covenant invade Nueva york

El protagonista de Crysis mirando de espaldas a la cámara.

 Antes de dar comienzo a mi responso, he de advertir que esto no es un análisis, convencional al menos, más bien se puede considerar como una pequeña percepción al jugar a este pedazo de juego, por que a diferencia de otros compañeros Pceros que han repudiado el título, a mí personalmente Crysis 2 me ha encantado y lo he saboreado a base de bien. El análisis correrá a cuenta de otro incauto. Una percepción, que desde luego es reproducible, pero sin ninguna connotación negativa. Se tiende a pensar que cualquier opción expresada es una crítica, en su sentido malinterpretado, negativa, nada más lejos de la realidad. Y es que Crysis 2 comparte jugabilidad y algo más con una de mis sagas favoritas Halo.

Digo ahora en alto y claro pues que tanto Halo como Crysis 2, me parecen dos de las mejores cosas que me he pasado por la piedra.

 Al comenzar a jugar, los primeros enemigos a los que te enfrentas, con tu traje aun no tuneado son hombres como tú, bueno como yo no, ya quisieran algunos de estos soldados el solomillo que tengo en la entrepierna. Hasta ahí todo normal, un festival de gráficos y pirotecnia que en más de una ocasión o puntualizando, en los momentos que llevas esa especie de tanque dan ganas de ponerse la walkiria de Wagner mientras repartes estopa y al terminar de aniquilar a todo bicho viviente ir a hacer surf al río Hudson.

 Mira tú por donde que empiezan a venir los marcianos, los primeros, fáciles carne de mi cañón. Un poquito más rápidos y cabrones que los soldados pero ya iba siendo hora de que la cosa se complicara y tener un nuevo reto que sacie mi sed de sangre. (si lee esto un redactor de antena 3 me manda a mi casa a la Interpol)

A medida que en la “pasarela Cibeles” van apareciendo más modelos de marcianos más me va pareciendo ésto, a otro juego de matar marcianos…

 Cuando la invasión se va complicando, al entrar en una zona de combate, el número y forma de Aliens va en aumento. A esos primeros marcianos a los que hacíamos mención, se apunta a su fiesta un grandullón, el típico bestia acompañado de cuatro o cinco más canijos que él que son los encargados de provocarte para que entres al trapo y armar una buena, vamos como en las discotecas. A este nuevo mozo de tres metros, coraza que no la atraviesa ni la mirada más intensa, y un escudo que parece resistir hasta un ataque nuclear, la única forma, o por lo menos la más efectiva, es flanquearlo y atacar su punto más débil: la espalda. Coño!! Como los Hunters

 Adentrándome cada vez más por los escombros de la ciudad, salgo por la parte trasera de un edificio a una zona despejada con mi camuflaje activado…observo a una nueva raza de bicho que está encaramado en un vehículo, se me acaban las pilas de mi traje y el bicho gira su cabeza y me localiza, bah! Pienso yo, llevo mis pipas bien cargadas de munición. Lo encañono y para mi sorpresa el fulano no atiende a mi duelo con su fusil de plasma, si no que viene hacia mí corriendo con aspecto amenazante y con un arma punzante que lleva en la mano y me ensarta como una morcilla de burgos…pantalla roja. Muerte al instante. Coño!! Como los Elites!!

 El metro de Nueva York da asco en este juego, no hago más que encontrarme con cucarachas tamaño Schwarzenegger y gente medio zombi, afectada por un virus que los come por dentro y parece ser una amenaza tanto para nosotros como para los de fuera del planeta sin detallar más para no spoilear. Coño!! Como el Flood

«El Flo, no confundir con el Flood»

 De vez en cuando, vienen naves de transporte que en vuelo rasante dejan algún que otro pelotón de marcianos. Y en alguna ocasión tienes que borrarlas del mapa….mmm… Déjà vu…

 Siendo un poco puñetero y viendo las muestras “sutiles” a lo largo del juego podemos encontrar concordancia con las Mechas del juego y los Scarab. Salvando las distancias o mejor dicho las dimensiones, la sensación producida es similar, estás acostumbrado durante el juego a una determinada escala de enemigo y de pronto aparece algo descomunal. También debemos darle por el culo en su sentido literal, pues es su punto débil, para acabar con él. La intensidad en el combate cuando aparece uno de estos bichos es indescriptible, yo personalmente disfruto como un enano.

 Y ahora vamos con el Nanosuit

 La sensación que he tenido jugando crisis 2 es la de controlar a un ser superior gracias al traje, en Halo la superioridad espartana es por su entrenamiento, modificación genética, armadura…llámalo x, a fin de cuentas, un ser poderoso que se adapta al entorno, se anticipa a la posición del enemigo, dispuestos como fichas de ajedrez, que maneja a su antojo y eso me encanta, no es algo negativo ya que adoro la saga halo, de hecho la sensación de jugar a alguno de estos juegos y luego ponerse otro “suter” en el que eres un mero mortal se antoja, al menos en la primera hora de juego, aburrido al manejar a un mierda con una mierda de  fusil. Es frustrante no poder acercarse a un nazi o a cualquier otro tipo de enemigo que consideren oportuno, sin tu camuflaje para cortarle el cuello o recorrer 100 metros como Usain Ball para meterle la culata del arma hasta el orto.

 No vengo aquí a descubrir nada del otro mundo. La originalidad es el arte de ocultar la fuente, pero me hace gracia descubrir estas pequeñas cosas. Ya los Elites de Halo me recordaban (o son de clara inspiración) a los Predatores por su doble juego de mandíbula, su movilidad o capacidad de camuflaje, o los mismos Spartans, espartanos del futuro con mezcla de jedis donde debemos destruir un arma capaz de acabar con planetas enteros…Coño!! como la Estrella de la muerte

Para Orgullogamers, Abuelo Cebolleta 

En Cebollinos del pimiento a 14 de junio de 2011.

Por la Presente Bien de Salud.

0 0 Votos
Article Rating
Subscribe
Notify of
6 Comments
Oldest
Newest Most Voted
Inline Feedbacks
View all comments
6
0
¡Dinos lo que piensas, comenta!x